viernes, 30 de noviembre de 2007

Alas sobre gris

Son las mariposas, son breves con su caricia al cielo. El sesgado susurrar de sus alas y la dulzura del día después tras un día de hirviente azul ocre. No son las sorpresas lo que busca cada estancia en una nueva piedra, ni siquiera es solo afán de conocer el universo concentrado en una rugosa superficie invadida por la suavidad del musgo. No es solo eso. Podría parecer a ojos de otro insecto que lo único que buscan es un lecho amable donde caer en un profundo sueño, pero también estarían confundidos. Las mariposas no piensan en su supervivencia frente a los elementos, tampoco se puede resumir su vida en un simple aleteo en busca de la cópula con otra mariposa. No les importa que haya o no haya descendencia, lo que verdaderamente les importa es la belleza de cada figura, de cada movimiento en contra del deslizar del viento, de cada haz de luz que desvían con sus livianas alas. Piensan que la belleza es todo y se embriagan de ella, se olvidan de lo que a otros insectos importa, rehuyen cualquier explicación del mecanismo simple que engloba cada vida. Solo existe la mariposa y su evasión, la búsqueda de la belleza, nunca se darán cuenta de que viven y van a morir.

martes, 27 de noviembre de 2007

Positivismo


Ama el viento y las nubes.

Ama el frío y su noche.
Siempre engancha sus sentidos
con el tiempo,
con la imagen pasada.
Porque hubo un tiempo atrás
ahora hay poso y futuro.
Fortuito o no,
privilegiado o no,
pero hay un corte en el tiempo.
Sinsabor sentenciado
por uno,
que puede verse comprendido en el transcurrir
de la vida como luna,
escurriendo su luz entre nubes negras.
Forzando pasiones y acallando lágrimas,
pudiendo asfixiar gritos de socorro
o encontrar el beneplácito del amor.
Al final son nuestros pasos,
nuestras palabras,
nuestros labios y nuestras miradas
los que decidirán el mundo.

domingo, 25 de noviembre de 2007

Micronomic



El silencio siempre es correcto. La ensoñación en su dosis.

Ayer fue un poco más, un paso más en el escarpado desfiladero. Siempre existirá un “¿cuánto más?” sin que se cuestione el riesgo; ya se apartará la mano cuando la piel esté quemada.

Lo cierto es que con esos árboles podados la vista es poco tranquilizadora. Si habitualmente es fría la sensación que transmite, hoy es una fosa común.

Sí, me gustó el día de ayer, pero no es sano echarse la manta encima y pensar que no hay un mundo allá fuera, por desagradable que sea.

Recomiendo el antifaz negro.

jueves, 22 de noviembre de 2007

Polyethylene


Antes de que caduque.

"La ausencia de sentimientos no es agradable cuando imposibilita el surgimiento de cualquier idea que sea reflejo del alma. Realmente, cuando alguien no siente nada, se podría decir que es transparente a juicio de su propio pensamiento. Es algo desagradable observar como día a día, las motivaciones que aparecen con el devenir de los hechos cotidianos y casuales, se van desvaneciendo sin poder hacer nada para evitarlo. Se puede considerar, pese a todo, que describir la indiferencia supone un proceso explicativo de unas problemáticas particulares pero, en el fondo, pensando más allá de las meras palabras, la descripción no trasmite ningún sentimiento. Podría compararse todo esto a la lectura de cualquier prospecto médico o manual de instrucciones de algún cachivache moderno. En definitiva, no hay nada que lograr con ello ni consuelo en la lectura ajena de la explicación misma.
El dolor es fácil de expresar. La felicidad no tanto, pero sigue siendo posible. Sin embargo, la indiferencia sentimental produce una absoluta deriva interior donde, los puntos de referencia que sirven de apoyo para el día a día de cualquier vida, se encuentran diluidos en el tiempo de espera hacia algo momentáneamente interesante.
Decir que no hay nada más doloroso que la indiferencia es mentira; en todo caso, podría afirmarse que es insoportablemente incómodo porque evapora cualquier posibilidad de interactuar con el entorno. La relación personal, social, aunque solo sea mediante la interacción de dolorosas palabras, es lo que permite a una persona afrontar la vida de diferentes maneras. Podrás ir exultante al trabajo, e incluso si no has tenido un buen día, podrás volver a casa hecho un basilisco, pero cada dulce o envenenada palabra constatará el hecho de que vives dentro del mundo que te rodea, o que al menos vives aportando y viendo como el marco aporta algo a tu vida.
Dentro de los estados del alma, me arriesgo a afirmar que no hay ninguno más significativamente próximo a la muerte que la propia indiferencia."

miércoles, 21 de noviembre de 2007

From Another Life


Me cuesta escribir, las letras se aferran al alma.

Como el alma está quieta, sedada, aburrida, las palabras no se exaltan.

Y si el alma no se exalta, no hay nada que escribir.

Vacío insalvable.

Eterno.

Como el abrazo de aquel atardecer invernal, gélido, mientras el horizonte ardiente trataba con cariño de apaciguar el mar. Eterno.

Tan rápido puede uno decirlo:

Eterno.

Tumbarse entre sus sábanas.

Dejarse evaporar por el tiempo.

Despertar para sentir algo.

El precio de la droga es la vida, es el recuerdo, es cada una de las tardes lluviosas. Es el maldito intento de tatuar su nombre en una herida abierta. Destartalando el ecosistema, destartalando los sesos, ¿quién puede ahora perderse si ya no hay muebles?

¿Dónde está la alfombra bajo la que barrer toda la mierda?

¿Quién diferenciaría una mentira? Ni el interés, ni la cárcel.

Parece eterna esta sensación, y el problema es que no es bella.

Tan solo aburre…

No es dolor.

No es tristeza.

lunes, 12 de noviembre de 2007

Azul pétreo invadido de tóxicas nubes grisáceas escupidas por la humanidad siderúrgica. Ese podría ser el resumen de lo que obsevaba tras las ventanas del autobús, un anochecer inmediato, una brevedad contaminantemente bella. Después se haría de noche y la música empezaría a aburrir, el beso de nicotina pediría turno y finalmente las sábanas cargarían con el agotamiento diario. Físico, mental, paranormal, agotamiento androide, aburrimiento visceral.

Esperar aburre y definitivamente me aburre tanto aburrimiento.

Esperar.

Esperar.

Climbing up the walls.

sábado, 10 de noviembre de 2007

Don't Think

Parece helado el manto con el que la noche envuelve cada paso resonante en las desgastadas baldosas. Cabeza gacha y un rumbo dubitativo mientras la luz de esa farola estalla, desaparece, amando el hueco en las sombras bajo las suelas de mis zapatos. Solo palabras apremian la desidia del deshielo, indiferencia. Mintiendo, porque la indiferencia es clara y rotunda, como la dificultad de expresar el problema. La droga pura del alma, la confianza de ir un paso más allá, no mirar el suelo y mantener la cabeza erguida sobre las alturas.

"Clonc!"

La farola. La mirada al frente se tambalea.

Re Fa Si

Me duele la cabeza y tengo sueño. No tengo tenazas que tiren de palabras más precisas.

sábado, 3 de noviembre de 2007

Quejas de Bandoneón


"Won't let the creeping ivy,
Won't let the nervous bury me.
Our veins are thin,
Our rivers poisoned,
We want the sweet meats
We want the young blood
"

La lagartija se escurría lentamente bajo las piedras, obviamente era consciente del peligro de aquellos enormes pies qué, sin querer, sin pretenderlo, podían acabar con su vida. Pero verdaderamente a nadie le importa lo que le hubiera pasado o le dejara de pasar a aquella puta lagartija.

Realmente, ¿quién puede sentirse ofendido por un juego que no es el suyo? Cada persona es libre de atar o desatar, de entretenerse en juegos infantiles o aparentar vivir en el marco de la consciencia. La realidad detrás de todo esto es la de asumir las consecuencias, incluso si aparentemente no existen. Aparentemente, puesto que después de todo, cada acto genera su propia consecuencia.

Así que, siendo sinceros, dos labios más o dos labios menos forman parte del juego infantil, no son nada fascinante ni sobrecogedor. Dos labios más o dos labios menos son un precio razonable por olvidarse de la cabeza y limitarse a jugar. Dos labios siempre son dos labios, no son una mirada o una palabra interesante. Si de palabras interesantes se tratara, esto no sería un estúpido juego.

Pero... (siempre hay un "pero" ^^) aún tratándose de un juego, todo juego tiene sus reglas obviamente. Así pues, dos labios menos es un precio razonable si de igual manera sirven para conocer al conocido, aquel que se viste con pieles de cordero bobo y que resulta ser un desalmado :'( . Pero bueno, ¿quién se puede sorprender a estas alturas? para algunos los labios siempre cotizan al alza, como la envidia de no ser el centro de atención. Entonces es cuando los corderitos descalifican en nombre del "inocente" (ahora sí tiene sentido) y logran un buen tocho de bistec de labio, de atención o lo que demonios sea.

Un chico bastante inteligente dijo una vez "dadle al cesar lo que es del cesar y a Dios lo que es de Dios", y a eso un servidor se remite, con la única diferencia de que yo no pongo la otra mejilla, no es divertido... Prefiero jugar ^^. (yeah! xD)

Así que, ¡por favor! que nadie espere una retaíla de poemas empalagosos por tamaña banalidad ni celos ni sentimientos bonitos a la vista, esos se guardan para las palabras interesantes, para las miradas.

Y en cuando a los desalmados lobitos, espero que no se atraganten con un mixomatoso conejo.


Y ya está, hasta aquí las quejas de Bandoneón. (quién coño sera ese? xD)